‘- por Anita Andrade

Miren cuán bueno y cuán agradable es que los hermanos habiten juntos en armonía. ~ Salmo 133:1

La comunidad de Jesús, el buen pastor, en Toronto Canadá, celebró su 22do aniversario con gran gozo. La comunidad se estableció el 8 de septiembre de 1996. Pasó de un pequeño grupo de 4 parejas a 45 adultos, 11 jóvenes y 25 niños. Verdaderamente aquí “mandó el Señor la bendición, la vida para siempre”.

La celebración inició cuando Edwin Andrade, el coordinador mayor, compartió unos comentarios sobre cómo inició la comunidad y cómo ha sido un caminar en fe con el Señor que nos guía en cada paso. Luego comenzamos la Celebración de Apertura del Día del Señor intercalada con cantos de alabanza gozosa y acción de gracias.

Cada uno de los miembros tenía su corazón lleno de gratitud pues la mayoría de nosotros migramos desde la India y empezamos una nueva vida en Canadá.

La generosidad y as bendiciones de Dios para con cada familia se pudieron apreciar en los muchos jóvenes y niños presentes.

Luego tuvimos la ceremonia de cortar el pastel, que se combinó entre el aniversario de la comunidad y el 1er cumpleaños de los gemelos que nacieron el año pasado: Pablo y Mateo, hijos de Rolando y Denise. Estos dos niños nacieron entre muchas complicaciones, pero la mano de Señor cubrió a su madre de un modo especial en ese tiempo. Con mucha oración y apoyo de parte de la comunidad, los padres recibieron a sus preciados hijos. Las dos hermanas estaban muy alegres, ahora cada una tenía un bebé para jugar. Fue un momento muy especial de la noche.

Más tarde, tuvimos a 5 de nuestros niños que compartieron sus testimonios del reciente viaje al campamento de verano del Pueblo de Dios en Pittsburg. Hubo una línea común en todos los testimonios: la pasaron muy bien y todos planean regresar el año que viene. El padre voluntario, Dylan, dijo que fue el punto alto del verano y que él también aprendió mucho de esta experiencia.

Group photo at one of the community events this year

Hicieron una presentación de fotos de los eventos del años pasado, entre ellos el campamento de niños de marzo, el Summer Jam, los eventos de jóvenes, el retiro anual de enriquecimiento familiar en la cabaña, el Seminario de Vida en el Espíritu, la celebración de Navidad y muchas otras. Nos trajo muy buenos recuerdos de excelente compartir fraterno y también muchas risas.

Si para algo so buenos nuestros miembros es para pasarla bien y disfrutar una buena comida.

En fin, fue una noche para recordar, y el versículo que hemos recibido constantemente a través de los años: Juan 10:10 “Yo he venido para que tengan vida, y para que latengan enabundancia” sigue siendo un testimonio de su amor de alianza y su fidelidad para con nosotros como miembros de la comunidad.

Que Jesús, el buen pastor, continúe cuidándonos y guiándonos. Que nos lleve por el sendero que nos ha mostrado y que así como él ha entregado su vida por sus ovejas, también nosotros seamos reflejo de su imagen y entreguemos nuestra vida por nuestros hermanos y hermanas.

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Anita Andrade es una miembro de la comunidad de Jesús, el buen pastor en Toronto, Canadá.